Burdeles y salones de Sex Doll. Las personas con un fetiche por las muñecas sexuales o las personas que están dispuestas a satisfacer sus necesidades sexuales con muñecas sexuales realistas son un grupo en crecimiento. La demanda es tal que ya existen varios salones de muñecas sexuales en varios países.
El primer salón de muñecas sexuales del mundo, LumiDolls, se creó en Barcelona, España, en febrero de 2017. Lo que logró la creación de muchos más salones de este tipo en todo el mundo debido a su gran aceptación entre el público barcelonés. Sin embargo, la creación de un salón de muñecas sexuales depende de la legislación de un país y otros cumplimientos normativos. Por lo tanto, a diferencia de los burdeles, no insulta los derechos de las mujeres ni está relacionado con el tráfico de personas o el crimen organizado.
Una muñeca puede tener más clientes que las prostitutas reales
Hay un burdel de muñecas sexuales en Dortmund (Alemania) con 11 muñecas sexuales. Cada una con su propio nombre, identidad, altura, etnia, color de cabello y tamaños de senos. Uno de ellas se ve exactamente como una muñeca sexual japonesa de cabello azul. Aunque esto te parezca extraño, se puede ver a las esposas de muchos usuarios de estos salones de muñecas sexuales esperando en el coche fuera de las salas mientras sus maridos entran para tener relaciones sexuales. Recientemente, una muñeca sexual «Fanny» se convirtió en la superestrella más vendida del burdel Kontakthof en Viena, e incluso consiguió más clientes que las verdaderas prostitutas.
«Las Sex Dolls son proveedoras de servicios ideales. Siempre están ahí, nunca enferman, siempre se ven bien y tienen los tres agujeros disponibles sin quejas ni cargos adicionales», dice Evelyn Schwarz, prostituta, dominatriz y Madamme del Burdel de Dortmund.
Hay muchos salones populares de muñecas sexuales en todo el mundo como KinkySDollS en Toronto (Canadá), The Dolly Parlour en Greenwich (Inglaterra), Xdoll en París (Francia), Playmate Dolls en Toronto, Canadá y la primera del mundo LumiDolls en Barcelona (España)
Burdeles y salones de Sex Doll para todos los gustos
En estos más que populares salones de muñecas sexuales puedes elegir entre muñecas sexuales femeninas, masculinas y transexuales. Son las mismas muñecas sexuales realistas y de alta calidad que puedes ver en nuestra web. Están hechas con material TPE de alta tecnología que es la simulación más cercana a la piel humana real. Estas muñecas realistas se pueden usar para tener relaciones sexuales vaginales, anales, orales y mamarias de forma seguras. Sí, has leído bien, mamarias, pues existen mujeres de grandes pechos que tienen orificios de penetración con una textura y hermeticidad únicas en los pezones y proporcionan un nivel de sensación intensa que es difícil de lograr incluso a través de una penetración real.
Los clientes incluso pueden solicitar cómo se deben vestir y estar las muñecas cuando lleguen a la cita. Con el pago realizado en línea, habrá una interacción mínima o nula del personal para que puedas tener acceso a un entorno totalmente privado con tu muñeca sexual y disfrutar de todas tus fantasías más salvajes con ella. Y no solo los hombres visitan estos salones. Como lo reveló Graham, propietaria del salón de muñecas sexuales más grande del Reino Unido, Lovedoll UK, muchas mujeres vienen a estos salones para comprar muñecas sexuales TPE para evitar que sus maridos les pongan los cuernos.
Muñecas limpias y en condiciones higiénicas
Mientras que a algunas personas no les importa tener relaciones sexuales con una muñeca sexual usada, otras ni siquiera tocarían una muñeca de este tipo. Por lo tanto, las salas mantienen a las muñecas impecables y se limpian después de cada uso con una fórmula especializada para silicona TPE. Una limpieza profunda y esterilización después de cada uso. La luz UVC también se usa para eliminar las posibilidades de infección bacteriana. Aún así, se recomienda usar lubricantes o condones cuando se practica el sexo con un muñeca sexual de burdel y eliminar las posibilidades de enfermedades de transmisión sexual tal y como harías con una prostituta real.
Cuidar de la muñeca sexual es fácil y eso permite que los burdeles tengan breves descansos de mantenimiento. Lo mismo aplica, por supuesto, una muñeca que has comprado y tienes en tu casa.
¿Cuánto cuesta una cita en un salón de muñecas sexuales?
Los precios dependen de cada burdel pero nos movemos entre los 80€ por 30 minutos hasta los 180€ por dos horas con tu muñeca sexual favorita. Algunos salones también han creado muñecas sexuales masculinas para satisfacer las necesidades de las clientas y los clientes gays. Las muñecas sexuales con IA te permitirá sentirte y comportarte como con una persona real.
Puedes hacer con ellas lo que quieras, dentro de lo razonable y nada violento. Pagas al principio, pasas el tiempo contratado con tu muñeca favorita y simplemente te vas. Más tarde, incluso puedes hablar con algunas muñecas robot con Inteligencia artificial que pueden responder y tal vez moverse por su cuenta.
Sex Doll Burdeles mejoran los matrimonios y reducen la tasa de criminalidad
Un beneficio clave de los salones de muñecas sexuales es que los hombres con fantasías extrañas pueden hacer que se sientan satisfechos con una muñeca sexual realista, en lugar de expresar la necesidad de actuar agresivamente con mujeres reales. De esta manera, nadie necesita sentirse avergonzado y todos están a salvo. Estos salones de muñecas sexuales ayudan a reducir las tasas de delincuencia relacionadas con los delitos sexuales, mejoran la vida sexual en los matrimonios y brindan a hombres y mujeres formas de explorar los fetiches sexuales sin la necesidad de ser juzgadas por otras personas. Normalmente disponen de todas las categorías diferentes de muñecas sexuales, solo debes preguntar.
Para concluir este artículo sobre Burdeles y salones de Sex Doll deciros que pueden ayudar a muchos a satisfacer sus necesidades sexuales, incluso para aquellos que les cuesta tener una conexión real con otras personas, les es difícil de conquistar o simplemente piensan que conquistar una pareja es demasiado tiempo y esfuerzo. Los clientes pueden incluso actuar «un poco más raro» con una muñeca sexual de lo que lo harían con una persona real sin ningún tipo de juicio posterior.